Puesta en marcha de la transición energética
El desafío más importante al que se enfrenta la humanidad en el siglo XXI es resolver la crisis climática. Debido al uso indiscriminado de los recursos naturales del planeta y la voraz industrialización de nuestras sociedades, el sistema terrestre ha superado su capacidad para absorber las emisiones de gases de efecto invernadero.
En el Acuerdo de París de 2015 sobre cambio climático se acordó limitar el aumento de la temperatura del planeta por debajo de los 1.5C respecto a los niveles pre industriales.
Para ello, Europa ha acordado la necesidad de detener la emisión de los gases de efecto invernadero por completo para antes del 2050. La puesta en marcha de la transición energética es necesaria para lograr el objetivo marcado por la comunidad europea.
Este proceso se centra en la descarbonización del sistema energético, reemplazando los combustibles fósiles como el petróleo, gas natural y carbón por fuentes de energías renovables.
Una implementación oportuna requiere múltiples enfoques, siendo el ahorro y la eficiencia energética los factores que juegan el papel más importante, como suscribe el lema “Primero la Eficiencia Energética” de la Comisión Europea.
En este sentido, las Auditorías Energéticas son la herramienta crucial en la mejora de la eficiencia energética de las operaciones en las empresas.
¿Cómo es el consumo energético en españa?
En España, el sector industrial había sido tradicionalmente el mayor consumidor de energía, sin embargo, en la década de los 70 se pusieron en marcha algunas medidas de eficiencia energética que implementan mejoras tecnológicas y que permitieron reducir parcialmente el consumo energético de este sector.
Actualmente la industria es la responsable del 24% de consumo final de energía, siendo el segundo sector de mayor consumo solo por detrás del sector transportes (43%).
Planes de Acción de Ahorro y Eficiencia Energética
En noviembre de 2016 la Comisión Europea presentó el paquete “Energías Limpias”, conocido como “Winter Package”, con la finalidad de acelerar la transición energética hacia el uso de las energías limpias por medio de medidas y propuestas en línea con el cumplimiento de los objetivos establecido en el Acuerdo de París de 2015.
En España, la legislación deriva de la Directivas Europeas:
- Directiva Europea 2006/32/CE
- Directiva Europea 2009/91/CE y la 2010/27/CE que la modifica
- Directiva Europea 2012/27/CE
Traduciéndose en medidas concretas que el estado español promueve para que las empresas contribuyan a lograr los objetivos marcados en materia de ahorro y eficiencia energética.
Dentro de estos Planes de Acción, las Auditorías Energéticas son la primera medida a tomar para que el sector industrial alcance los objetivos de ahorro de energía en España, “Planes de Acción de Ahorro y Eficiencia Energética”.
Otro hito imprescindible dentro del ámbito legislativo de las auditorías energéticas es el Real Decreto 56/2006 de Eficiencia Energética, en la que se señala que las empresas con más de 250 trabajadores o un volumen de ventas superior a los 50 millones deberán someterse a una auditoría energética al menos cada 4 años de manera obligatoria.
En 2017 se ratifica el acuerdo de París, donde España comienza a trabajar en el marco estratégico de energía y clima desprendiéndose múltiples leyes y planes que buscan fundamentalmente la reducción de las emisiones de CO2 y la mejora en la eficiencia energética.
- Plan Nacional Integrado de Energía y Clima.
- Ley de Cambio Climático y Transición Energética.
En qué consiste una auditoría energética
Una Auditoría Energético es el estudio en profundidad del comportamiento energético de un edificio o una industria y sus instalaciones con el fin de detectar posibles ineficiencias y proponer las soluciones más eficientes manteniendo incluso mejorando el confort, la salubridad y la seguridad en el edificio.
Es decir, permite cuantificar las oportunidades de mejora energética del sistema de producción y la infraestructura de las instalaciones.
La duración media de una Auditoría Energética es de entre 1 y 4 meses. Las medidas recomendadas suelen traducirse en el sector industrial en un ahorro de entre el 5 y el 20% y suelen el retorno de la inversión se recuperan en menos de 6 años.
Ahorro del 5-20% anual.
Periodo de recuperación de la inversión 5 a 6 años.
Las Auditorías Energéticas son el principal paso que deben tomar las industrias para implementar un Sistema de la Gestión de la Energía como la norma ISO UNE EN 50001.
Las Auditorías Energéticas permiten conocer a fondo cada uno de los procesos efectuados en la empresa y su implicación con el gasto energético para así proveer de soluciones novedosas que fomenten la reducción del consumo de energía.
Proceso
- Alcance de la Auditoría Energética (en función de las necesidades de la empresa)
- Reunión de Inicio
- Visita a las instalaciones y recopilación de Información relevante en cuanto a consumos energéticos
- Medición de consumos con equipos especializados.
- Análisis en base a la información recopilada.
- Presentación a la empresa de las recomendaciones y oportunidades de ahorro.
Beneficios de una auditoría energética
Más que un gasto representa una inversión que dará muchos beneficios a corto plazo recuperándose a través de los ahorros de la facturación energética y que perdurarán en el tiempo permitiendo:
- Mejorar la competitividad en el mercado.
- Mejorar la promoción de la innovación.
- Mejorar la imagen corporativa de la empresa.
- Representar una garantía de calidad de cara a tus clientes.
- El acceso a ayudas de la administración pública para la realización de estos estudios.
Las Auditorías Energéticas son la solución ideal para valorar tus necesidades energéticas y buscar alternativas eficientes que te permitan optimizar el rendimiento de tus instalaciones y reducir el consumo.